Mi nombre es Helena y, entre otras muchas cosas, soy fotógrafa, más diseñadora que ingeniera, profesora y amante de la sencillez.
Desde bien pequeña me he fijado mucho en los detalles y en las pequeñas cosas que rodeaban mi día a día. De ahí, que empezara a desarrollar una de mis pasiones, la fotografía. Me enamoré de ella por las historias que transmitían ciertas instantáneas y por querer de alguna forma, explicar lo que no podía con palabras.
Gracias a mi recorrido y a toda la gente maravillosa que he ido conociendo por el camino, mi portfolio y estilo se han ido (y aún siguen) transformando en un carácter fotográfico muy variado, sin dejar de lado la sensibilidad y dedicación que hay detrás de cada proyecto, y dotando cada trabajo de una personalidad y esencia únicas.